Detengámonos a pensar en nuestra niñez. ¿Si pudieras regresar, escogerías la misma o harías las mismas cosas? ¡Yo estoy casi segura de que yo sí! Tengo muchos recuerdos que cuando los pienso me sacan sonrisas, me hacen remontar esas amistades con las que compartí y hicieron de mi niñez una mejor. Cuando nena hacia cosas totalmente diferentes a las que hacen nuestros niños ahora. Una de las cosas que más disfrutaba era jugar con mis Barbies en el medio de la acera con mi mejor amiga, jugar escondite, correr la bicicleta, los patines, sentarme en el piso a hablar cualquier cosa hasta tarde. Eran los mejores tiempos.
Creo que somos muchas las mamás/ papás viendo la tecnología entrar a la vida de nuestros pequeños.
En ocasiones miro a mi hija y digo “si pudiera tener la mitad de la infancia que yo tuve”. Y es que la tecnología nos ha sumado y nos ha restado con nuestros niños, ya es muy raro ver niños como nos veíamos nosotros hace algunos años atrás. La tecnología se ha apoderado de ellos, entre videos de YouTube, redes sociales y tantos accesos a diversiones tecnológicas les ha restado lo lindo de esa edad. No puedo negar que no me pasa, aunque me queje, mi hija es feliz viendo un video de 20 minutos de “Jake Paul”, su YouTuber favorito, pero imaginaba una casa regada con muecas a los 9 años, no una PC. Creo que somos muchas las mamás/ papás viendo la tecnología entrar a la vida de nuestros pequeños. Y seamos sinceros, muchas veces ese iPad nos ayuda a entretenerlos mientras hacemos X o Y cosa, así que mamis, estamos identificadas en todos los aspectos.
Pero, está en nosotros recordarle a ellos lo que verdaderamente es disfrutar el outdoor. Les voy a contar un poco de los que fue nuestro 4 de Julio y de paso les presento parte de My Crew, porque me di cuenta en ese momento que la tecnología puede estar presente pero esas cosas que de chicos hacíamos siguen gustando año tras año. Quedamos en reunirnos en casa de los tíos de mi nena, algo muy sencillo, familiar pero que de seguro iba a mantener los nenes entretenidos. Entre piscina, hamburgers, buenas conversaciones y risas estaban ellos en una piscina disfrutando. No sé si les pasa, pero las risas de los niños son de las mejores cosas, es que es tan real.
Lo mejor llegó luego, inesperadamente y la reacción fue esta “ay está lloviendo, ¿nos vamos para dentro?” (normal) pero de momento, todo cambio y había 4 niños mojándose en la lluvia, con las risas más grandes, las caras de felicidad en su máxima expresión. ¿Así hacíamos no? ¿Recuerdas esos bailes bajo la lluvia? Mami siempre me decía que me iba a enfermar, mi abuelita también, pero siempre buscaba la forma de mojarme – jajaja – eran de los mejores momentos.
Como les dije en Risas con sabor a Blueberries, todo está en las pequeñas cosas. Organizamos muchas veces estos super días para ellos y con lo que la naturaleza nos regala ellos son felices. Esos bailes entre primos me recordaron lo afortunados que somos los que nos llamamos “mama” o “papa”, por ellos vivimos. Por un momento vi mi niñez y no les puedo negar que sentí muchas ganas de brincar charcos con ellos y dar vueltas por la calle.
Con esto aprendí que tenemos que mojarnos más en la lluvia y que somos los únicos responsables de disfrutar de las cosas que la naturaleza nos regala. Estoy segura que habrá más bailes bajo la lluvia para nuestros cuatro pequeñines.
Cuando el día este de lluvia abre tu portón y déjalos disfrutar, tu, solo siéntate a disfrutar esos minutos de lo privilegiada que eres. Si no tienes hijos, llévate tu sobrino.. o invita tu pareja a un beso bajo la lluvia. !La vas a pasar bien, I’m sure!
BIG HUG! – Jai
My Crew: Fabiana, Anaia, Thiago, Julian.
Ps. !Gracias mom’s por decir si para compartir este momento!
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